Al vestir el escapulario, y durante toda la vida, es muy importante que sepamos apreciar su profundo y rico significado, como pertenencia a una Orden, a la del Carmen, con obligación de estar según su rica espiritualidad y su propio carisma.

Es como un práctica carmelita en miniatura que todos los devotos pueden portar como muestra de su consagración a la Virgen.

Desde el siglo XVI -que es cuando se extiende por toda la cristiandad el uso del escapulario del Carmen- casi todos los Papas lo han vestido y propagado.

Cuando el escapulario se ha desgastado, puede reemplazarse por unidad nuevo bendecido, pero no se tira a la basura.

La imposición, por primera ocasión, la debe de hacer de preferencia un sacerdote, con una oración como la sucesivo: “recibe este escapulario bendito y pide a la Virgen Santísima que, por sus méritos, lo lleves sin ninguna mancha de pecado y que te proteja de todo mal y te lleve a la vida eterna”.

En su forma original, el Escapulario es una parte del costumbre monástico (el traje que llevan los monjes). Se compone de dos grandes piezas de tela, conectadas en el centro por unas tiras más estrechas, al igual que un delantal que cubre la parte delantera y la parte posterior del que lo usa.

3. Identificación: finalmente, resistir el escapulario es un signo foráneo de pertenencia a la tribu carmelita escapulario de la virgen del carmen y de identificación con sus Títulos y espiritualidad. Es importante resaltar que el escapulario no es un amuleto mágico, sino un sacramental que nos ayuda a existir nuestra Certeza.

El primer escapulario read more here debe ser bendecido por un sacerdote y puesto sobre el devoto con la subsiguiente oración: "Recibe este escapulario bendito y pide a la Virgen Santísima que por sus méritos, lo lleves sin ninguna mancha de pecado, y que te proteja de todo mal y te lleve a la vida eterna".

Sigue la oración global. Se proponen algunas intenciones a elegir las más adecuadas o añadir otras relacionadas con las peculiaridades de los fieles o de las circunstancias. El celebrante inicia diciendo:

Esta día es muy importante para los devotos de la Virgen del Carmen, no obstante que se proxenetismo de un día de celebración y homenaje a esta santa patrona de los marineros y de los conductores de transporte.

Carmelitas Descalzas de Nogoyá, Argentina, vistiendo el escapulario El escapulario consiste en dos piezas de tela pardo colgando una de las piezas sobre el pecho del portador y la otra sobre su espalda. Las piezas se hallan unidas con dos cuerdas o tiras que pasan sobre los hombros del portador y sus escápulas (u omóplatos), de aquí procede el nombre "escapulario".

Es importante rememorar que el serio valía del escapulario no reside en el objeto en sí, sino en la devoción y el compromiso espiritual que representa.

En la tentación, tomamos el escapulario en nuestras manos e invocamos la audiencia de la Origen. Kilian Lynch, antiguo Militar de la Orden dice: "No lleguemos a la conclusión de que el escapulario está dotado de alguna clase de poder sobrenatural que nos exceptuará a pesar a pesar de lo que hagamos o de cuanto pequemos...Una voluntad pecadora y perversa puede derrotar la omnipotencia suplicante de la Madre de la Misericordia."

El escapulario del Carmen debe ser bendecido e impuesto por primera oportunidad por un sacerdote, en una breve ceremonia.